Las personas con esquizofrenia a menudo atribuyen sus propios pensamientos y acciones a fuentes externas, como en el caso de las alucinaciones auditivas (las "voces" que les dicen cosas pero que en realidad son pensamientos de ellos mismos). Otros síntomas comunes incluyen delirios, así como pensamiento y habla desorganizados. En definitiva, a menudo malinterpretan lo que perciben en su entorno y lo que experimentan.
Una investigación reciente ha aportado nuevos y reveladores datos sobre los mecanismos cerebrales específicos que podrían ser responsables de esta interpretación errónea de percepciones y experiencias. En concreto aseguran que ciertos errores de percepción en personas con esquizofrenia concuerdan con interferencias o "ruido" que afectan negativamente a una señal cerebral conocida como descarga corolaria.
Una descarga corolaria es la copia de un mensaje del sistema nervioso que es enviada a otras partes del cerebro, de tal manera que seamos conscientes de que estamos haciendo algo. Por ejemplo, si queremos mover nuestro brazo, el área motora del cerebro envía un mensaje con la orden al músculo que produce el movimiento, pero una copia de este mensaje, que es la descarga corolaria, es enviada a otras regiones del cerebro, para informarlas del movimiento en curso. Si usted mueve un brazo, y no existe la señal de la descarga corolaria, podría asumir que alguien se lo está moviendo.
De la misma manera, si usted genera un pensamiento, pero no se emite la correspondiente descarga corolaria, usted podría asumir que alguien acaba de colocar el pensamiento en su mente (las famosas "voces" que dicen cosas como por telepatía).
Así, las descargas corolarias aseguran que las diferentes áreas del cerebro se comuniquen las unas con las otras, de tal manera que seamos conscientes de que estamos moviendo el brazo, o pensando nuestro propios pensamientos.
Las descargas corolarias se dan en todo el reino animal, desde los insectos hasta los humanos, y parecen ser imprescindibles para una correcta automonitorización de las acciones que realiza uno mismo.
En este nuevo estudio, realizado por el equipo de Christopher Pack, Verónica Whitford, Gillian O’Driscoll, Debra Titone y Alby Richard, se ha identificado un trastorno en las descargas corolarias que se da en los pacientes con esquizofrenia.
Sus resultados revelan que no es que las personas con esquizofrenia no tengan descargas corolarias, ni que las tengan con retraso o en una amplitud escasa, más bien parece que tienen señales de descarga corolaria poco nítidas, por contener demasiado "ruido".
Según dijo el Dr. Pack "nos sentimos optimistas de qué podemos trabajar en retrospectiva a partir de los datos de la conducta hacia la base biológica de los efectos de la descarga corolaria. Ya hemos comenzado a hacerlo con modelación computacional. Podemos convertir matemáticamente la descarga corolaria de un testigo sano en la descarga corolaria de un paciente con esquizofrenia al añadir ruido y aleatoridad".
El hallazgo podría ayudar a diagnosticar más precozmente y a tratar mejor esta difícil enfermedad.
Fuente: Science Daily